Los dominicanos estamos perdiendo hasta el modo de caminar, llegan a mi los recuerdos de la Semana Santa, a partir del jueves santo empezaban a llegar los Jaquimeyeros Ausentes, algunos en vehículo privado y la mayoría en transporte público.
El jueves era el día de la faena, todo lo concerniente a las habichuelas con dulce, los cocos para el moro, la tilapia, eran recolectados y preparados para que estén listos para el viernes, pues ese día no se podía hacer bulla, era el día de la muerte del señor. El sábado era día de visitas, ir a cazar al monte, correr cachua, agarrar mariposas e ir a bañarse al río o al mar, el domingo era el día donde se empezaba a recoger los motetes para marcharse, el lunes se trabajaba.
El día de los fieles difuntos era día de respeto y de demostrar afecto a los seres ido de este mundo, se podían ver el día anterior la recolección de flores, buscar latas viejas y la fabricación de velas o comprarsela a Pitrón.
Diciembre era la época donde podíamos exhibir el flu nuevo, todos esperábamos con ansia ese mes, pues era el mes donde nuestros padres podían hacernos la compra de la tan esperada babucha o apeame uno. Mes donde en la panadería de Epifanio Matos (Ple) había que hacer fila para hornear un marranito o una gallina, antes se hacia en Palo Alto, allí tenían una panadería primero que en Jaquimeyes.
Pero no se de donde le salen a muchos incultos dominicanos el de celebrar el día de acción de gracia, ustedes saben lo que cuesta criar un maldito pavo, y lo que come esa jodia ave, al igual que el día de las brujas; de las únicas brujas que siempre oí hablar eran de la que se chupaban a los niños, de los zánganos y de los vacá. Lamentablemente estamos perdiendo el sabor de una gallinita criolla bien guisada y robada a alguna incauta señora Jaquimeyera, las pobres cachua son enmascarado que han perdido el respeto y la admiración de nuestros niños perdidos en la práctica del sexo, el desfile de nuestro pueblo hacia Bombita a ver El Gaga al igual que el Domingo hacia Cabral, a ver cuando Repicaban Gloria.
Nos estamos convirtiendo en pueblos sin tradiciones propias, donde las mecedoras de mis abuelos no representan una reliquia si no una porquería inservible, Santa Clo es un gordo baboso y sin oficio, la Vieja Belén es una bruja sucia, El Cuco es el fulano mas feo del pueblo, y así por estilo.
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