domingo, 23 de febrero de 2014

Ha fallecido Manolo Batista Cabrera

La Asociación de Jaquimeyeros Ausentes se une al dolor que embarga a la familia Batista Matos por el fallecimiento de Manolo.
Sus restos están siendo expuesto en la Funeraria Blandino de la Av. Sabana Larga del Ensanche Ozama

martes, 11 de febrero de 2014

Alcalde destaca la sentencia del TC a favor de municipio

listindiario.com
Ramón Cruz Benzán


Santo Domingo

El alcalde del Ayuntamiento del municipio de Jaquimeyes, Domingo Florián, saludó ayer la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) que le otorga la administración de la fábrica de sal marina Puerto Alejandro, tras acoger una acción de amparo interpuesta por los juristas Bienvenido Fabián Melo y Geremías Florián Escanio.
 
Agradeció la decisión “justa” del TC y sobre todo a su comunidad por darle todo el apoyo, invitando a los inversionistas nacionales y extranjeros a fijarse en este renglón productivo, ya que a partir de este fallo las inversiones serán más estables y garantizarían nuevas fuentes de empleos en las comunidades productoras de sal marina.
Florián afirmó que la sentencia sienta un precedente, en el sentido de que a los ayuntamientos pequeños hasta ahora, no se le había reconocido plenamente el derecho de ejercer su potestad territorial y su autonomía.
“Hoy en día existen ayuntamientos de municipios cabeceras que controlan áreas de municipios pequeños. A partir de ahora no se tolerarán intromisiones de ayuntamientos con mucho poderío económico en el territorio de los ayuntamientos pequeños”, enfatizó.
El Ayuntamiento de Barahona llevaba más de 50 años extrayendo la sal marina de Puerto Alejandro, lo que generó un conflicto con el nuevo alcalde de Jaquimeyes, quien decidió enfrentar en el ámbito judicial al Ayuntamiento de Barahona y desplazarlo de la administración de la fábrica de sal marina.
Según el alcalde, el país cuenta con la capacidad de producir toda la sal de consumo humano necesaria, pero actualmente existe mucha deficiencia en la administración de las salinas en el país, lo que ha permitido que empresarios extranjeros hayan creado un monopolio con la importación de sal, situación que ha afectado seriamente el desarrollo de ese renglón productivo.

domingo, 9 de febrero de 2014

Cuando una amiga se va, no existen palabras para sustituir el vacío que queda en nuestros corazones.


Cuando un amigo se va 
se queda un árbol caído 
que ya no vuelve a brotar 
porque el viento lo ha vencido. 
Cuando un amigo se va 
queda un espacio vacío 
que no lo puede llenar 
la llegada de otro amigo.

Sentir la espontaneidad de tu risa, la sincera manifestación de esa gran amiga, tu dulce mirada de humildad, admiracion y respeto del verdadero sentimiento de amistad, el manifiesto que queda sellado en los corazones de cada uno de los que realmente fuimos tus amigos.

Te has ido como el agua cuando se desliza entre los dedos de tus manos, tan solo dejando la sensación de  profundo vacío que dejan el sabor amargo que emerge de lo mas profundo de tu alma, un vacío que dejan brotar lagrimas de impotencia y el dolor de perder tu dulce compañía.

Ya tu inseparable risa no podremos verla, sentirla y disfrutarla, pero quedara junto a nosotros en cada recuerdo, en cada camino y en cada espacio de lo que compartimos contigo.

Tal vez la muerte te haya vencido, pero el verdadero tú quedara impregnado en nuestros corazones como queda el amor materno, aquel que fortalece a nuestras familias.

Tus verdaderos amigos, y aquellos que sintieron la verdadera relación de hermandad jamas podrán decirte adiós, sino hasta pronto, porque jamas perecerá en cada uno de lo que realmente fuiste para nosotros.


martes, 4 de febrero de 2014

LA REALIDAD DE ALGUNAS CREENCIAS

Las estrellas de la noche hacían juego con la suave luz de la luna, en el horizontes algunas figuras de nubes semejaban juego con la creatividad abierta de los infantes, donde la imaginación se confundía con la que creían que las manos divina creaban las figuras para enviar un mensaje; mientras los adultos contaban sus historias de vivencias y sucesos de las noches oscuras, donde con valentía y bravura lograban salir, los muchachos con la boca abierta y la mirada fija se confundían entre miedo y admiración.

Esa noche pasaba lentamente como otras noches cualquiera de verano, en algunos puntos los niños y adolescentes realizaban algún tipo de juego, hombres conversaban, señoras tejían u organizaban las habitaciones, se tendían las camas con sabanas limpias, colocando los mosquiteros, había que evitar los mosquitos o que algún insecto pique a los muchachos, la bacinilla se colocaba delante de la cama.

Como siempre el rebuzno del burro y el canto del gallo, indicaban que había llegado la mañana, algunos hombres se levantaban a preparar las monturas mientras sus esposas le preparan algo de desayuno y el café, aquellos que no tenían montura se iban con machete al cinto y macuto al hombro.

Esa mañana fue diferente, la rutina de levantarse temprano y hacer los preparativos para que el marido vaya a realizar sus labores productivas, fue igual. Lo que no estaba en la rutina fue que algunas señoras comentaban el haber escuchado los llantos de una mujer durante la madrugada por su hijo, y que la voz de esos gritos le parecía conocida, pero la que pensaban que era, ya había muerto y no era posible que una muerta llorara; fueron varias las mujeres que aseguraron que si habían escuchado esos gritos desgarradores por su hijo.

La mañana siguió avanzando, las mujeres en sus casas realizaban las labores que día a día le daban el toque del pueblo que les identificaba, un pregón vendiendo habichuelas, otra vendiendo plátanos, otra vendiendo la tilapia y el sonido de los vehículos que transitaban por la calle principal de la Capital o de Barahona y otros pueblos.

Cerca del medio día llego una infausta noticia, un camión cargado se había accidentado en el tramo de Azua a Santo Domingo, el camión era del pueblo y el conductor y los ayudantes también, el camión perdió el control y se metió en una casa, cayéndole el plato de la marquesina encima de la capota, matando al chofer.

La noticia se regó como pólvora en el pueblo, gritos y lamentos se escuchaban por doquier, algunas mujeres recalcaron la veracidad de los gritos escuchado esa madrugada, confirmando que la voz de la señora que había muerto era la misma y fue al hijo que lloraba el que se mato en el accidente.