viernes, 22 de octubre de 2010

MOMENTOS QUE CREARON REVUELO EN JAQUIMEYES

Celestino y Agustina, una pareja humilde y trabajadora con su vivienda al lado de la Escuela Primaria, en los terrenos del play donde los Jaquimeyeros vivieron momentos de júbilo y emosiones de esos grandes campeonatos de baseball.

Eran los momentos de gloria de ese gran equipo "Los Diablos Rojos" donde se destacaban esos grandes peloteros de la época, como lo era Coradín, conocido por "Manchita" debido a un gran lunar que se destacaba en su cara, este pelotero tenia la proeza de ser excelente con el guante y de batear la pelota por donde el quisiera, también cabe mensionar a Titia, conocido por el "Peje" nombre dado por su gran habilidad de desplazamiento en la tercera base, al igual que Delirio, hermano de Manchita, que en los momentos de apriete entraba de emergente con un gran madero con la marca "made in gonzalez" para decidir el juego, otro pelotero notorio era Ravelo, tiene el mérito como picher de ganarle a un equipo triple A norteamericano  una por cero, además de varios premios con el Equipo de Barahona. Celestino y Agustina procrearon varios hijos, las mayorías esta vivos aun, dentro de ellos recordamos a una de sus hijas con cierto problemas genético, CHICHI LA MULA quien procreo con CUCÚ a La Chuiza, Avión y al Bizco, después creó un niño con CACAO EL BLANCO, hijo de Kin y Mamasita.

Chichi la Mula siempre estaba pendiente de su criatura, preocupada por su alimentación sin la ayuda de su progenitor Cacao, esta vivía en una casita estilo cocina que estaba del lado atrás de la casa de sus padres. Esta señora siempre sonriente y era querida por niños y viejos, era como una "loca mansa" que era incapaz de hacer daño alguno a ninguna especie.

Una Noche Chichi la Mula salió a buscar alimento para su criatura, dejándola acostado en su cama, al regresar resulta que el niño estaba muerto, esa noche fue de revuelo y la lamentaciones de la gente, pero resulta que las autoridades determinaron que la muerte fue por asfixia, y de ello acusaron a su madre, porque las huellas en su cuellesito eran las manos de una mujer, CHICHI LA MULA fue condenada a cinco años de prisión, y a partir de ese momento su alma entró en pena, tanto así que al año y algo de cárcel murió de tristeza.

Para las autoridades la culpable de la muerte fue Chichí la Mula, pero para el pueblo fue Cacao para no mantener al hijo procreado, resulta que este tenía las manos finas, por herencia y porque era poco trabajador, al tiempo Cacao intentó matarse infiriéndose un par de puñaladas en el Bar, otra vez se lanzo delante de un vehículo, y al final murió con un brazo apuntando para el cielo, clamando por su pecado.

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