Muchos de mi generación conoció a Angel María el esposo de la profesora Fiameta, la mujer blanca que vivía en la entrada de Palo Alto, esta señora tenia una excelente biblioteca entre sus libros habían colección de enciclopedias y una de la revista educativa popular de la época, Selecciones de Reader's Digest, señora muy culta y conversadora.
Angel Maria era un gran bebedor, me cuenta la esposa de un sobrino de Fiameta que ella dormia en una habitación contigua a la de el, la pared era de tabla, Angel despertaba de madrugada, dentro de su jumo se recordaba de su trago, ella oia cuando el se embicaba de la botella, erutaba y seguia durmiendo.
Me cuenta mi padre que cierta vez Angel le contó que se habia dado un jumo tan grande que cuando llegó a su casa no podia entrar, porque la veia dando vuelta; entonces disque pensó -bueno lo que tengo que hacer es esperar la próxima vuelta que de la casa frente a mi me engancharé de la puerta, asi me voy junto con ella y entro.
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