CUALES NOMBRES DEBEN LLEVAR NUESTROS MONUMENTOS Y LUGARES PUBLICOS

Nuestros antecesores van contando historias de sus vivencias, prácticas y costumbres, además de ir transfiriéndola a sus descendientes, es su papel como los actores de cada evento. Cada individuo tiene un papel que jugar en su época productiva, en lo familiar, lo social y lo cultural.

Cada vez que una persona realiza acciones que beneficia a la colectividad, sin importar el objetivo, ya sea para producir la manutención tanto de él como de la familia, por jobi, por placer o por vocación, no importa, lo importante es el beneficio que genera tanto para las presentes como para las futuras generaciones dentro de la comunidad.

Para designar con el nombre de una persona a un monumento o un espacio publico de una sociedad se tiene que tomar en cuenta que ese nombre se esta colocando porque se esta enviando un mensaje a las nuevas generaciones, diciéndole que se premia el servicio que esta hizo por su gente y por su pueblo. Es esta una de las razones por la que tenemos que investigar previamente la trayectoria de esta persona, ver realmente lo que dejo, el beneficio y cual es el ejemplo para la mayoría.

Por ejemplo Alejandro de la Paz y Chocho fueron las personas que diseñaron el sistema urbanístico de Jaquimeyes, ahí están sus trabajos, fueron las personas que cambiaron las casitas de tejamaní por casa de tablas tanto de palma como de otras maderas; existen muchos mobiliarios diseñados con sus propias manos. De igual forma podemos hablar de Anacleta Castillo, Niña y Clarita, somos muchos los que inhalamos el aire puro de la vida gracias a sus manos.

No podemos inmortalizar el nombre de una persona por capricho o porque fueran nuestros amigos, si fuera de esa forma, a Pune tendríamos que tomarlo en cuenta, igual que el ciego que pasaba vendiendo maní, fueron muchas personas que se divirtieron con sus jocosidades, pero ese no debe ser el objetivo del reconocimiento.

Tenemos realizaciones tangibles de personas a la que tenemos que hacerle merecido reconocimiento público, pero el nombrarlo en un monumento es una desfachatez. Tiene que ser un trabajo mas serio, es una forma de inmortalizar y un camino para que las futuras generaciones tomen su ejemplo.

Las autoridades deben investigar la historia de su pueblo, sus antecesores y conocer sus aportes. Juntemonos como sociedad civilizada y elaboremos un reglamento donde se legalice los pasos a seguir para nombrar un espacio publico, una comisión de cinco personas que investigue la vida de los que hicieron sus aportes al pueblo y a su gente.