Los ciudadanos tienen derecho a disfrutar de los servicios básicos que se generan en base al desarrollo de los pueblos, pero tenemos que entender que tales servicios tienen un costo, y este costo es lo que proporciona que dichos servicios lleguen a cada uno con calidad.
Si usted recibe un servicio, es su deber entender que ese servicio conlleva un personal que devenga un salario, que el producto que genera ese servicio depende de una materia prima que tiene un costo, por eso tiene precio.
No se puede justificar que aquel que paga por ese servicio tenga que sufrir la penalidad de los evasores del pago de dicho servicios, es una obligación del productor proporcionarlo, pero tampoco se justifica que un grupo de vándalos se den a la tareas de apedrear a las personas que tienen derecho a transitar por las vías públicas, y peor aun si pagan sus impuestos.
Pero lo que colma lo injustificable es que un grupo de vándalos se den a la tarea de crear desórdenes para chantajear a choferes y pasajeros, a partir de ahí las reclamaciones por mas justas que sean se convierten en actos reñido por la ley, al parecer los organizadores de protestas en el pueblo de Jaquimeyes sufren de demencia, no es la primeras vez que en medio de protestas un grupo de delincuentes se den a la tarea de asaltar a choferes para dejarlos cruzar hacia sus destinos.
Creo que las autoridades están en el deber de depurar para que las personas decentes y trabajadoras no estén mezcladas con vándalos, esta práctica empaña la imagen de nuestro pueblo.
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