El argumento de la intimidación es una confesión de impotencia intelectual.
El hombre que produce mientras los demás disponen de su producto es un esclavo.
Ningún hombre puede tener el derecho de imponer a otro hombre una obligación no escogida, un deber no recompensado o un servicio involuntario.
Cuando el bien común de una sociedad es considerado como algo aparte y superior al bien individual de sus miembros quiere decir que el bien de algunos hombres tiene prioridad sobre el bien de otros hombres, aquellos consignados en el estatus de animales sacrificados.
La justificación moral del capitalismo yace en es el único sistema consonante con la naturaleza racional del hombre, que protege la superviviencia del hombre como hombre y que su principio gobernante es la justicia.
La menor minoría en la tierra es el individuo. Aquellos que niegan los derechos individuales, no pueden llamarse defensores de las minorías.
Si quisiera hablar con vuestro vocabulario, diría que el único mandamiento moral que tiene el hombre es: Pensarás. Pero un "mandamiento moral" es una contradicción en los términos. Lo moral es lo escogido, no lo forzado; lo comprendido, no lo obedecido. Lo moral es lo racional, y la Razón no acepta mandamientos.
Puesto que no existe tal entidad conocida como "el público", ya que el público es meramente una cantidad de individuos, la idea de que "el interés público" va por encima de los intereses y derechos privados solo tiene un significado: que los intereses y derechos de algunos individuos tienen prioridad sobre los intereses y derechos de los demás.
¡Dios salve al capitalismo de los defensores del capitalismo!
Me pregunta usted: "Exactamente, ¿por qué no cree usted en Dios?" Porque no he encontrado argumento racional que apoye dicha creencia.
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